Jesús tuvo amigos pobres, incluso algunos de sus discípulos lo fueron. Otros no: Pedro era patrón de pesca, es decir, tenía barcos en propiedad y empleados. Mateo era rico, porque era recaudador. Pero también tuvo amigos ricos: Lázaro el de Betania, Nicodemo, Zaqueo.
Jesús no está a favor ni de ricos ni de pobres, ni en contra de ninguno de ellos. Jesús ve a la persona despojada de estas circunstancias y la valora según su corazón...
Por los que sí hizo una opción fue por los necesitados y se dispuso a ayudarles: pero unas veces les daba pan y otras curaba a los hijos de pobres viudas o de ricos magnates, porque la necesidad puede afectar a unos y otros.
Jesús sólo rechazó a los hipócritas, nunca al que se acercó a Él con sinceridad: fuese rico o pobre, sabio o inculto, importante o paria.
Pues eso...
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