lunes, 18 de noviembre de 2013

La moral, ¿es algo exclusivamente personal?

Decía en la entrada anterior que se considera la moral un concepto religioso y sólo exigible, por tanto, a quien practica las creencias de las que procede dicha moral. Quizá en algún caso sea así; pero en lo que a la moral cristiana se refiere, ésta tiene amplia base y reflejo en la conducta social; y, por tanto, no es algo exclusivamente personal.
Por ejemplo, la moral judeo-cristiana se basa fundamentalmente en los Diez Mandamiento que Dios le escribió a Moisés; y que suponen un compendio de la conducta humana de lo más completo…; y, comparado con los hábitos de aquella época, supone un código de conducta avanzadísimo. Los cinco primeros regulan las relaciones del hombre con Dios: son más específicamente "religiosos", por así decirlo. Pero los demás son totalmente sociales. Repasémoslos:
Honrarás a tu padre y a tu madre: por supuesto se trata de algo íntimo de la persona que lo practica; pero también contiene toda una salvaguarda del orden social: si la familia –célula básica de la sociedad- es fuerte y marcha bien, toda la sociedad irá bien. Entonces, ¿sería lícito exigir a los no cristianos que cumpliesen esta norma en beneficio de la sociedad? ¿No es una obligación religiosa que también tiene connotaciones éticas?
No matarás: no se puede hacer mal al prójimo, porque todos somos hijos de Dios; pero ¿no está claro que también es una obligación ética exigible en cualquier sociedad de cualquier creencia?
No cometerás adulterio: es una obligación para los cristianos ser fiel a la propia esposa/marido y respetar a la esposa/marido de los demás. Pero ¿no es también una exigencia ética? ¿No es una norma fundamental para proteger la familia y, en consecuencia, el tejido social? Hasta hace bien poco, en la mayoría de los países occidentales el adulterio era un delito, ya que suponía el quebrantamiento grave del contrato matrimonial. Pero, si queremos evitar el adulterio, no sería bueno que cada uno tuviese controlada su sexualidad, evitando excesos… Por supuesto, esto ya es más difícil de regular desde el código penal, pero sí se podrían generalizar normas éticas que evitasen ese hiper-sexualismo que es lo que a la postre lleva al adulterio, las agresiones sexuales, la pederastia y tantas otras conducta que están reprobadas por la sociedad. ¿No somos un poco hipócritas? Si tanto reprobamos estas conductas que consideramos tan graves, ¿por qué no sugerimos filtros que ayuden a evitarlas? ¿Por qué no promovemos entre nuestros estudiantes el autocontrol de la sexualidad para evitar futuros problemas? ¿Por qué no se rechaza la pornografía generalizada que a muchos les lleva al descontrol de sus impulsos sexuales? Es que éstas serían posturas morales; y en esto no se puede meter la sociedad porque es algo privado. Hipocresía. Sí, son posturas morales, pero su implantación produciría beneficios sociales innegables.
Seguiremos hablando, porque nos quedan otros cuatro mandamientos...

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